«Enhorabuena a Javier Castillo, un buen descubrimiento, unthrillermuy bien llevado, con personajes muy dispares que se van entremezclando de forma poco predictiva. Podría salir una muy buena película de suspense».
Son algunas de las cosas que se pueden oir sobre esta novela, emparejada con la de "El día que se perdió el amor" que también me ha encantado, ambas las devore en tiempo récord y me dejaron tal sin sabor y tan alegre a la vez.
No puedo contar nada sin comprometer el secreto y los misterios del libro, pero tiene todo lo imprescindible, misterio e intriga que sumergen al lector, que no para de pasar paginas sin control...
Conforme tomas la recta final del libro van encajando las piezas del puzzle, tejido con maestría como una tejedora de ovillos sin flecos, vemos como puede convertirse una persona en juez y en verdugo a la vez, serie de victimas y que lo hace por pura convicción de fe que esta haciendo lo correcto "presente=pasado" para comprender.
En una palabra: ADICITVA
SINOPSIS
«A veces el destino nos pone a prueba para que sepamos que existe».
Centro de Boston, 24 de diciembre, un hombre camina desnudo con la cabeza decapitada de una joven. El doctor Jenkins, director del centro psiquiátrico de la ciudad, y Stella Hyden, agente de perfiles del FBI, se adentrarán en una investigación que pondrá en juego sus vidas, su concepción de la cordura y que los llevará hasta unos sucesos fortuitos ocurridos en el misterioso pueblo de Salt Lake diecisiete años atrás.
Valoración: *****
Paginas: 456
Editorial: SUMA
Fecha de publicación: 2017
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